Ads 468x60px

Featured Posts

jueves, 7 de julio de 2016

Te dejé triste y vacía

Nota: ésta entrada la escribí después de regresar a mi casa el sábado 31 de Octubre de 2015, no la había publicado, pero ahora la comparto con la familia, les solicito que después de la lectura se tomen unos minutos y dejen abajo su comentario y algún recuerdo bonito vivido en nuestra casita.

Te dejé triste y vacía, casa de Melquiada, casa de mi abuela querida, casa de todos en mi terruño, en mi Peñas Negras.

Vacía tu sala, tu comedor, tu cocina; sin la presencia de mi abuelita del alma, casa mía, casa bonita, casa de mi infancia, de mis recuerdos, te sentí triste y vacía.

Nuestra viejita bella se nos fue el 24 de octubre de 2015, y me quedé tres días en su casa, días de recuerdos, de pensamientos, de lágrimas tristes, de risas forzadas, también de alegría y de compartir nuevamente en familia.

El primer recuerdo que tengo de ti, casa bonita, se remonta a la boda de mi tía Yajaira, cuya celebración fue en casa de mi tía María, y que sólo una puerta “siempre abierta” nos deja pasar a ti, casa de mis memorias. Que fiesta, que celebración, que recuerdos.

Recuerdo todavía los anexos de barro, el cuarto de Juan Félix, o el de los varones, y el cuarto de Vena’o, el chofer de “El Audaz”, el autobús que junto con el de César “El Camastrón”, otrora nos llevaba desde mi casita en Güigüe a ti, casa de mi abuelita, en Peñas Negras.

Recuerdo que no había portón sino una cerca, y por esa entrada todavía diviso un viejo guanábano que tenía grabado en letras cuadradas “PIQUITO” el pseudónimo de uno de mis primos. En el fondo a la derecha otro guanábano, y a la izquierda un viejo y enorme árbol de mango que nos acobijaba con su gran sombra, ese era el predilecto sitio de reuniones, el que hoy sigue siendo a pesar el sol de las tardes.

La puerta principal, esa de latón con dos eses (S) grandes y semi-cuadradas, entamboradas en ambas mitades. Recuerdo en el piso de tu porche marcado tu número de vivienda, y luego rehicieron tu piso, marcando Joel tu número con granos de maíz. Recuerdo tus dos baños externos o “excusados” detrás de los cuales jugando al escondí’o, un día me mordieron los bachacos.

Te recuerdo joven, te recuerdo vieja, pero nunca te vi triste, siempre alegre, siempre feliz, siempre de vacaciones en ti, llevando a mis tíos Juan Félix y Joel la comida al conuco, las arepas de maíz pilado en aquel viejo pilón; tantos recuerdos.

Recuerdo miles de cosas casita mía, casita nuestra: como cuando Nohelí desmallada y privada perdía el hálito en manos de mi tía Nohelia y como Dios nos la devolvió; recuerdo cuando me apodaron el siete copas, por haber molido siete copas de jojoto en poco tiempo; recuerdo el viejo televisor rojo en el que veíamos en VTV: Hunter el Cazador, Moñoño Corazón de Jesús, Hermanos, Beiwath, el futbol italiano y las comiquitas que a Juan Félix le gustaban; Recuerdo las literas en que dormíamos, las cachapas, el cochino frito, y mi plato preferido en cuanto llegaba: caraota con arepa frita en manteca y huevo frito en manteca.

En ti recuerdo mucho a mis tíos y primos; cada cumpleaños celebrado, cada navidad, cada fin de año, cada cañonazo, cada partida de ajedrez, cada juego de cartas, cada ludo, cada stop, cada momento pasa por mi mente, desde aquella celebración del matrimonio de mi tía Yajaira hasta hoy, no hay cosa que haya olvidado.

Mientras pasaba en ti mis vacaciones fueron seguidas las idas al río, a las quebradas, a los pozos, a los potreros, a Barbasco, a las Piedras, Vallecito y Santa Rosa, Juaniquero, Las Palmas y la Yagua; con mis primos y tíos, a pie o en camión, en la zorra de un tractor, siempre disfrute de ti mi casita, siempre disfrute de mi estancia en tus entrañas.

Lo que siempre te hizo especial fue mi viejita, mi abuelita, mi Melquiadita linda, querida, mi viejita amada; siempre estabas llena casa de mi alma, en ti no hubo escases sino abundancia, en ti no hubo dolor sino alegría, no hubo tristeza sino gozo, porque mi viejita linda siempre fue luz en tu interior, siempre fue tu alegría, siempre llenó tu espacio.

Me vine y te dejé triste y vacía, con ganas de verte llena, con anhelo de ver en ti a mi abuelita querida. Te dejé triste y vacía, pero llena de recuerdos; triste y vacía, y llenos mis ojos de lágrimas. Triste y vacía anhelando tú misma verte llena.

Por eso quiero regresar a llenarte, a llevarte regocijo nuevamente, con mis familiares verte llena, y devolverte, mi casita, tu alegría.

sábado, 13 de febrero de 2016

Suramérica, Latinoamérica e Hispanoamérica

Diferencias entre Suramérica, Latinoamérica e Hispanoamérica:

Comenzaremos diciendo que  la RAE en el Diccionario panhispánico de dudas da preferencia a Sudamérica, y aclara que Suramérica es también válida, pero menos frecuente. Entonces Sudamérica y Suramérica son términos equivalentes y se refieren a la mitad del continente americano que agrupa los países del sur, esto es:

Sudamérica = Suramérica = Argentina, Bolivia, Brasil, Chile, Colombia, Ecuador, Guyana, Paraguay, Perú, Surinam, Uruguay, Venezuela.

Latinoamérica son los territorios (no necesariamente países) del continente americano donde oficialmente se habla una lengua latina, una lengua latina es una lengua cuya raíz es el latín, a saber: el portugués, el gallego, el español, el asturleonés, el aragonés, el catalán, el occitano, el francés, el valón, el retorrománico, el italiano, el rumano y el dálmata.

Antes de seguir, es relevante mencionar que existen multitud de lenguas que se hablan en Canadá, pero solo el inglés (que conoce el 90 % de los canadienses) y el francés (que conoce el 60 % de la población) tienen estatus oficial. La constitución de Canadá en sí reconoce dos lenguas oficiales, inglés y francés, y todas las actas constitucionales están en ambas lenguas, por lo tanto Latinoamérica es:

Latinoamérica = Argentina, Belice, Bolivia, Brasil, la región francófona de Canadá, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Haití, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana, Uruguay y Venezuela, los estados y posesiones hispanohablantes de Estados Unidos en especial Puerto Rico e Islas Vírgenes de los Estados Unidos, y las posesiones francesas en América (Guadalupe, Guayana Francesa, Martinica, San Bartolomé y San Martín).

De los tres idiomas que definen a América Latina, el español y el portugués son los predominantes, quedando el francés como idioma de sólo un 3% de la población de la región.

Hispanoamérica se refiere a todos los países de América en que uno de sus idiomas oficiales es el español. Este territorio está compuesto por 20 países.

Hispanoamérica = Argentina, Belice, Bolivia, Chile, Colombia, Costa Rica, Cuba, Ecuador, El Salvador, Guatemala, Honduras, México, Nicaragua, Panamá, Paraguay, Perú, Puerto Rico, República Dominicana, Uruguay, Venezuela.

Iberoamérica se refiere a los países de América que fueron colonizados por los países de la Península Ibérica (España y Portugal).

Iberoamérica = Hispanoamérica + Brasil (para resumir).

Latino es una persona que como lengua materna hable el portugués, el gallego, el español, el asturleonés, el aragonés, el catalán, el occitano, el francés, el valón, el retorrománico, el italiano, el rumano o el dálmata.

Finalmente y como regalo, los países “panamericanos” son todos aquellos que forman parte de América, desde Canadá hasta la Argentina.

lunes, 28 de diciembre de 2015

El sacrificio del Padre

Dar todo por sus hijos


     Como hombre, he vivido etapas en mi vida que me han llevado de un peldaño a otro, hay puntos en mi historia que marcan un antes y un después, hay fronteras que se cruzan para no regresar.

     Unas de las fronteras más especiales que he cruzado en mi vida, ha sido la de "antes de ser padre" y "después de ser padre". El 01 de agosto del 2006 empezandito el día (12:30 AM), era oficialmente padre un preciado regalo que Dios me quiso dar, Aarón Gabriel; ocho años más tarde, nuevamente padre, al ver la luz el 23 de agosto de 2014 mi bella Luciana Estefanía, a eso de las 10:30 AM.

     Cuando era niño veía los sacrificios de mis padres, sin embargo no le daba la importancia que esos sacrificios merecían por ser parte del aporte que ambos hacían para verme crecer, tranquilo, alimentado, con salud. Hoy que soy padre, veo mi reflejo en el espejo de mis progenitores, entiendo y valoro mejor sus sacrificios, sus penurias, sus esfuerzos por darnos todo cuanto estaba a su alcance [y en este particular no me refiero sólo a lo económico], para vernos llenos de vida. Hoy entiendo los sacrificios que como padres hacemos por darles un futuro seguro a nuestros hijos.

     Como padre entiendo el dolor de tener un hijo enfermo o bajo sufrimiento de algún tipo, en ocasiones me convenzo, que si estuviese en nuestra voluntad, llevaríamos en nuestro propios cuerpos sus propias necesidades, sus enfermedades, sus dolencias, y entonces asegurarnos de su bienestar.

     Por años, por muchos años he oído y leído sobre el sacrificio de Cristo, he entendido que quienes aceptamos y entendemos su muerte vicaria en la cruz, entendemos también que fue un gran sacrificio, pero parece que a muchos de nosotros algo se nos escapó del análisis: El sacrificio del Padre.

     No puedo decir que sea mayor o menor, sólo puedo afirmar que poco se ha dicho del sacrificio de Padre, sí, que viendo a su hijo clavado en el madero y teniendo el poder para detener el dolor y el escarnio a que era sometido Jesús, su unigénito, prefirió verlo morir mientras oía su clamor: "Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?".

     No pretendo hacer un exhaustivo análisis, tampoco es mi intención hacer una ponencia teológica al respecto, sólo quiero resaltar que el sacrificio del Padre fue más allá de lo que imaginamos, el sacrificio de ver morir a su único fue por toda la humanidad, fue el precio que el Padre pagó para que la salvación nos alcanzara todos, el Hijo pagó con su sangre, el Padre también pagó con su silencio ante la injusta muerte de su Hijo; no fue indolente, no, fue valiente en ver la muerte sacrificial de su Jesús el Cristo, para ver también en su resurrección la salvación de todos nosotros los pecadores, los que ahora por el sacrificio del Hijo nos dio potestad de ser llamados también sus hijos, hijos de Dios.

     Gracias a Jesús, Dios Hijo, por su muerte vicaria, gracias a Dios el Padre, por soportar el dolor de ver morir su hijo por todos nuestros pecados, para que hoy tengamos en Él, un Padre, nuestro Padre, el que también se sacrificó.

     En esta época decembrina, donde por tradición celebramos el nacimiento de Jesucristo, recordemos que hace poco más de 2000 años nació en Belén, y que espera con ansias nacer y morar en los corazones de los hombres por quienes murió. Yo necesito de Jesús en mi corazón y en mi vida, tú necesitas de Jesús en tu corazón y en tu vida, acéptalo, cree en Él, debemos ser humildes y abdicar del trono de nuestro corazón y dejar que sea Jesús quien reine y gobierne en nuestras vidas, en nuestros hogares, en nuestra sociedad y en nuestro país.

¡Jehová te bendiga y te guarde!

viernes, 17 de abril de 2015

¡Así es que te recuerdo Gutierrez, así es que te recuerdo papá!

Carta a mi padre, si él pudiese leerla...

Hoy no es tu natalicio, ni el día de tu partida fue en esta fecha, no existe ninguna relación de fecha, acontecimiento o situación que hoy me haga recordarte, empero, tu recuerdo en mi memoria viene una vez tras otra, cada vez que quiere volver, vuelve padre, hoy nuevamente tu recuerdo invade mis pensamientos. No hay forma que leas esta carta que todavía no sé por qué escribo, pero si pudieras leerla, esto es lo que te escribiría:
En mi corazón no guardo rencor ni odio porque temprano te fuiste de casa, gracias a Dios por un corazón nuevo que no sabe guardar odio, que no puede, que no quiere; a pesar de tu ausencia en casa papá, recuerdo con mucha claridad casi cada momento que hablamos, compartimos, aquellas visitas cortas que nos dabas, aquellas visitas largas que te daba, las charlas de horas y horas sobre nuestros temas preferidos: La Biblia, Las Matemáticas. Recuerdo aquella frase que me dijiste entre temor y seguridad: “Siempre he creído y espero no equivocarme, que después de la Biblia y su doctrina, sólo hay otra verdad perfecta, los números y las matemáticas” (Febrero 2005).
Sólo con sexto grado papá, que obtuviste además de adulto [mientras pagabas servicio militar], sorprendías a allegados y familiares con tus habilidades para el cálculo, sumas largas, extensas, nunca nadie te vio usando lápiz y papel para sacar cuentas, excepto mientras enseñabas a otro . . . ¿calculadora? ahí sí que estabas raspado, nunca supiste usar una, pues la verdad es que no la necesitabas.
A mis 13 años, y por recomendación del profesor Luis Sánchez (Historia de Venezuela – C.C. Dr. Carlos Arvelo – Güigüe), conseguí prestado para leer, el libro “El Hombre que Calculaba”, de inmediato pensé que pese a tus limitados estudios de algebra elemental, clasificabas como excelente calculista, que Beremis Samir sólo te ganaba contando, pero en cálculo mental lo dejabas lejos. Me pediste el libro prestado y cuando pude comprar un ejemplar te lo presté, allí despertó tu curiosidad por el tema de la teoría de números y el álgebra elemental, aunque a eso le llamabas “Matemática Moderna”.
Recuerdo con claridad nuestras horas de conversaciones sobre propiedades elementales de los números naturales, me sorprendía escuchar las observaciones que hacías a propiedades particulares de ciertos números, me asombraba saber que descubrías por ti mismo cosas que yo las sabía por haberlas leído. Me dijiste un día “descubrí que la suma de los impares desde el uno hasta cualquiera, es igual a multiplicar por sí mismo, el número que resulta de dividir por dos, el último impar sumado con uno, y además descubrí que todos los números multiplicados por ellos mismos pueden obtenerse con esa suma, como una seguidilla uno tras otro” . . . eso me dijiste sin saber los conceptos de sucesión, de suma recurrente, de cuadrados, sólo conocías la aritmética para entonces.
Me hacías imprimir guías de matemáticas, de doctrina bíblica, de historia, entre otras cosas, siempre tenías una nueva petición para mí, y si lo olvidada, de seguro me recordabas después de saludarme de tantos días sin verte. No idolatro lo que fuiste en vida, sólo admiro tus habilidades, aquellas que me hicieron entender que las matemáticas eran, más que una materia, una ciencia imprescindible en el actual mundo que vivimos.
No existían retos numéricos para ti, con más de 50 años quisiste aprender álgebra e ibas por buen camino, cuando comenzaste a comprender bien el álgebra y la geometría elemental, te fascino el teorema de Pitágoras, y el 05 de Octubre de 2008, una llamada tuya me sorprendió de madrugada, cuando contesté me dijiste “feliz cumpleaños” (a esa hora ni recordaba que estaba cumpliendo mis 27), luego proseguiste, “mañana voy que tengo algo importante que decirte”. Fueron casi 34 horas que tardaste en llegar, me dijiste algo que yo ya sabía, pero igual me despabiló: “descubrí que hay números enteros que cumplen ‘a, b y c’ para el teorema de Pitágoras, pero si el exponente es mayor a dos, no hay enteros que hagan eso”. <<Fermat>> inmediatamente pensé, pero no te lo quise decir, pues quería ver que tan lejos llegabas. Unos meses después me dijiste: “sabes lo que te dije del teorema de Pitágoras, sólo se cumple para exponentes mayores con enteros, si la cantidad de sumandos es igual al exponente, o sea, que ‘a a la tres más b a la tres más c a la tres es igual a d a la tres’ y así sucesivamente con los otros exponentes más grandes”.
Calcular raíces cuadradas te fascinó cuando las conociste, y cuando te enseñé el algoritmo de Newton vivías practicando; me comentaste aquella vez que ya sacabas mentalmente raíces cuadradas de números de hasta 8 cifras con dos cifras decimales de ‘ñapa’ (yapa). “¿Cuánto tardas?” -pregunté- “depende, a veces hay cifras que son más difíciles que otras y no es asunto del tamaño que escoja, me gusta hacerlo cuando escucho un número de cédula, duro de 15 a 45 segundos, a veces hay unas en que no duro casi nada” -respondiste-.
Un sinfín de recuerdos vienen a mi mente cada día, pero sobre todo recuerdo aquellas cosas que sobre la Biblia me enseñabas, con tus palabras, pero sobre todo con tu paciencia, con tu piedad. Testimonio diste estando en vida que servías a un Dios vivo con temor, con valentía, con trabajo. La Biblia, la palabra de Dios, era aquello que más amabas, perfecto no fuiste, pero tus huellas nos dejaste, para que siguiésemos el camino al padre, de la misma forma que tú lo transitaste; hoy quiero seguirte, seguir a Cristo mientras recuerdo tu ejemplo, ejemplo de virtud, de palabra, de honestidad, de corazón que no conoció odio ni rencor.
Tu preocupación por mi salvación y la de mis hermanas siempre manifestaste, siempre tu consejo fue dulce, apacible, agradable, pero jamás aguantador, consentidor ni cegado; siempre directo, siempre certero, siempre para dar corrección, procurando siempre asegurar que nosotros fuésemos, al igual que tú, salvos en Jesús.
Cuando te presentaban una persona, tu nombre no decías, más bien tu apellido con firmeza declarabas: “mucho gusto, Gutierrez” . . . por eso, ¡Así es que te recuerdo Gutierrez, así es que te recuerdo papá!
Nota: Mi padre, Félix Gutierrez, falleció el 28 de Junio de 2011 después de una batalla contra el cáncer. En estas cortas líneas no exagero sus habilidades, familiares, conocidos y allegados pueden corroborarlo. Los diálogos que cité fueron textuales de lo que recuerdo de las largas conversas, uso sus expresiones que se amoldan a un lenguaje poco matemático (para los que nos defendemos en eso) debido a sus limitados conocimientos.

martes, 11 de noviembre de 2014

El Morbo a la Violencia Gráfica

El Morbo a la Violencia Gráfica

Una siembra que promete una cosecha de corazones insensibles

El diccionario de la RAE define morbo como una “Tendencia obsesiva hacia lo desagradable, lo cruel, lo prohibido” cuyos sinónimos no han podido ser más ilustrativos: “mórbido, malsano, patológico, insano, enfermizo, nocivo, pernicioso, retorcido, truculento, desagradable”.
Cuando se habla del morbo a la violencia grafica se hace referencia a esa disposición insistente a observar imágenes y videos cargados de violencia malsana; actividad que hoy en día se ha hecho habitual en jóvenes, niños, niñas y adolescentes, gracias [o desgraciadamente debido] a su gran proliferación en medios de comunicación masivos como la TV y sobre todo en la red Internet.
Veo con mucha preocupación que accidentes que deberían causar empatía con las víctimas y sensibilizarnos a la compasión por el dolor ajeno, esté causando burlas y risotadas de los espectadores que los ven en la red Internet, en la TV y en cualquier otro medio  audiovisual como lo es el caso de los teléfonos celulares.
            El mundo actual vive bajo reglas simples de oferta y demanda, si un canal de televisión oferta cierto programa o programación es porque sus zorros expertos en marketing ya han estudiado el mercado y sus demandas, que son justamente las tendencias del público receptor, o dicho de otro modo, lo que el espectador quiere ver. Que hoy en día Nat Geo oferte programas como “La Ciencia de lo Absurdo” (programa pseudocientífico donde se aprecian accidentes de todo tipo y antes y después una explicación irónica, burlista y “científica” a medio camino que “expone” las razones o causas del accidente) no es un asunto casual, pues la verdadera intención del programa es alimentar el morbo de niños, niñas, adolescentes y jóvenes que terminan burlándose y mofándose a carcajadas de la desgracia de otros que tristemente han quedado lastimados e incluso lisiados de por vida.
En Venezuela se producía y transmitía -en Televen- un programa titulado “Fuera de Aquí”, donde los jóvenes presentadores hacían cualquier tipo de locuras que terminasen en accidentes desastrosos; algunas veces se veían dichos presentadores con yesos, muletas, férulas, producto de sus propios actos, todo ello para hacer reír a un público que a gritos pedía esa desdichada programación; gracias a Dios salió del aire y de la manera que se fue, jamás regresó.
            No todos los programas tienen el tópico de “La Ciencia de lo Absurdo”, “Ciencia para Aficionados”, “Mayday: Catástrofes Aéreas” o “Fuera de Aquí”, hay otros que presenta el morbo desde una perspectiva “médica”, como es el caso de “Emergencias Sexuales”, “Urgencias Bizarras” (Bizarre E.R.), “El Lado Oscuro de la Ciencia”, “Sala de emergencias - Historias inéditas”, “Casos Médicos Increíbles” y algunos reality show’s sobre cirugías estéticas y otros tópicos donde abundan chorros de sangre por todos lados, huesos partidos, mala praxis, todo ello visto por un público que mayoritariamente tiene poco o ningún interés en el conocimiento médico, sino que más bien lo ve para nutrir un morbo exponencialmente creciente que cada día desea ver más y más, como si se tratara de alguna sustancia alucinógena.
            El problema no es la tecnología, sino el uso que el ser humano le está dando, deshumanizando su corazón, su conciencia, y como consecuencias sus actos. Antes del boom tecnológico post-moderno ocurría un accidente en alguna avenida y decenas, sino cientos de personas se agrupaban alrededor del lugar de los hechos, gente con diferentes intenciones, los que querían ayudar, los curiosos sólo para ver, los sensacionalistas o “periodistas” que luego magnificaban el evento y lo contaban a todo dar ya sea que manifestaran indiferencia con lo ocurrido o compasión, el averiguador que se acercaba a ver si había algún conocido el accidente, y … la lista es larga si la seguimos; pero hoy en día todos los que se acercan, sea cual sea lo que los ha motivado a hacerlo, incluso los rescatistas y paramédicos, sacan su teléfono celular para tomar fotos y vídeos de lo ocurrido y, en sólo minutos, circulan los vídeos y fotos en las redes sociales, llámense BB Pin, WhatsApp, Twitter y Facebook que son los vehículos más utilizados para estas deplorables y atroces acciones.
            Triste ejemplo se vivió en Venezuela con el nefasto accidente que pondría fin a la vida del comediante y actor Juan Carlos Adrianza. Fotos y vídeos circularon en las redes sociales incluso antes de la declaración oficial de su deceso por parte de las autoridades competentes, hecho ante el cual, familiares, amigos y compañeros de trabajo hacían un llamado a través de los medios de comunicación, a que se pusiera freno a la proliferación de las brutales imágenes que circulaban en las redes sociales ya que causaron gran impacto y aumentaron el sufrimiento y el dolor de aquellos para los que el recién fallecido significaba algo más que una imagen pública y humorística.
            Cuando veo la publicación de un vídeo o foto que promete gente herida, niños quemados, personas con enfermedades terminales, pocos comunes o escandalosas, que además vienen acompañadas de trampas caza bobos como “dale like (me gusta) o comparte y ayudarás a que la Corporación Gutierrez & CIA done un dólar a bla bla bla …” simplemente ignoro tales publicaciones, de preferencia las oculto del Facebook para no verlas y si el usuario insiste en publicar sólo temas de ésta índole, configuro que se oculten las publicaciones de ese usuario a mi vista o simplemente lo bloqueo. Propagar estas imágenes o vídeos compartiéndolas o dándole like no donaran ni medio vaso de agua al que aparece en la foto o vídeo, solo contribuirá a difundir una imagen o vídeo viral que alimentará el morbo de muchos que lo verán para burlarse o crear sádicas situaciones reales o imaginarias similares con aquellos que tienen en derredor.
            Lo que hoy es para muchos grandes risas, carcajadas y burlas, no es más que una siembra de semillas de insensibilidad en corazones y consciencias que estamos dejando que se realice en nuestra sociedad, y que promete grandes, envenenados y venenosos frutos para un futuro próximo donde será más importante grabar el vídeo de un infortunado que muere en la desgracia, antes que ir a rescatarlo. Si hoy permitimos esa siembra dejando que nuestros hijos aumenten el rating de esos vulgares programas de TV o que se deleiten en youtube buscando “vídeos divertidos” estaremos contribuyendo, regando y abonando un terreno, cual cosecha será dolorosa trayendo más sufrimiento a la sociedad del que actualmente ya padece. Vigila y supervisa lo que tus hijos ven en la televisión y en Internet, verifica con regularidad el contenido multimedia de su teléfono, no participes en la propagación de estas imágenes y vídeos llenos de morbo y violencia, no tienes excusa, siémbrales sensibilidad y amor al prójimo para poder ofrecerles un futuro mejor, porque el cambio comienza por ti.

martes, 26 de agosto de 2014

Un Bello Nacimiento


Una Gran Herencia

Dice la Biblia en el libro de Salmos capítulo 127:3-4: “He aquí, herencia de Jehová son los hijos; Cosa de estima el fruto del vientre. Como saetas en mano del valiente, Así son los hijos habidos en la juventud.”

Me sentí muy bendecido por Dios el 1º de Agosto de 2006 cuando nació mi hijo Aarón Gabriel, fue un día de larga espera, casi 16 horas desde que se manifestaron los dolores de parto de mi esposa hasta el nacimiento de mi hijo, y aunque yo estaba en el hospital, por razones de mal manejo de la información, me enteré casi 4 horas después, es decir, para mí la espera fue de casi 20 horas. Mi hijo hoy tiene 8 años y ha llenado de felicidad nuestras vidas, ha traído sonrisas, alegrías, ha necesitado cuido, educación, enseñanza; no somos los padres perfectos, pero hacemos el mejor intento con Dios dirigiendo nuestras vidas.

Hace tres días, el 23 de Agosto de 2014, Dios iluminó nuestras vidas nuevamente con el nacimiento de mi hija Luciana Estefanía, producto de un sano embarazo de mi esposa de casi 40 semanas; fue extraordinario ver mi hija en manos de la Dra. Saraí Monges, quien salió de sala de parto con mi hija en sus manos para mostrármela cuando no lo esperaba, fue sorpresivo, maravilloso, inigualable, simplemente un bello nacimiento, una gran herencia de Jehová.


Nuestro reto es ahora criar a dos y no a uno, como lo fue hasta hace pocos días; es darle amor equitativo, es prepararlos para la vida, es darle las herramientas para que sean personas de bien, lo que me recuerda especialmente que los dos versículos previos a la cita bíblica inicial (Salmos capítulo 127:1-2) dice: “Si Jehová no edificare la casa, en vano trabajan los que la edifican; Si Jehová no guardare la ciudad, en vano vela la guardia. Por demás es que os levantéis de madrugada, y vayáis tarde a reposar, y que comáis pan de dolores; pues que a su amado dará Dios el sueño.” De la que no se necesita mucha explicación.

Mi petición es a mi Señor y Dios, que aumente nuestra fe, nuestra fuerza, consolide nuestro carácter y nos enseñe a ser más como Él, pues ellos quieren ser como nosotros.

Mi especial agradecimiento a la Dra. Saraí Monges, quien no tiene tamaño para lo mucho que sabe y la nobleza de su corazón; a mi madre, a mis hermanas, a mis suegros y mis cuñados, que como familia unida han sido un punto de apoyo en el proceso que nos trajo a Luciana Estefanía, a los hermanos Jesús Ramírez y Luisa Suárez de Ramírez, cuya incondicional hospitalidad nos facilitaron la cercanía a los centros médicos, clínicas y hospitales que necesitamos ir para exámenes y evaluaciones; agradezco mucho también a aquellas personas que se escapan de mi memoria mientras emocionado escribo éstas líneas. Y por sobre todas las cosas, mi especial y gran agradecimiento a Jesucristo, el Señor Dios Todopoderoso, el Único y Eterno, a Él sea Toda la Gloria, por los siglos de los siglos . . . ¡ ¡ ¡ AMÉN ! ! !

viernes, 14 de marzo de 2014

¿Español o Castellano?

Existe cierta polémica en torno al nombre o denominación del idioma que hablamos. Para unos es castellano, para otros, español, y ya hay quien se atreve a nombrarlo según su propio gentilicio; por ejemplo en Venezuela ya hay quien dice: “aquí se habla venezolano”.
Un poco de historia
La península ibérica, conquistada por los ejércitos de Roma, adoptó el latín como lengua y pasó a formar parte del Imperio Romano. Antes de esta invasión iniciada en el año 218 a.C. y concluida en el 19 a.C., se hablaban varias lenguas que desaparecieron, excepto el euskera, que ha permanecido hasta nuestros días, con literatura exclusivamente oral hasta el siglo XVI, y escrita desde el año 1545.
Los romanos poseían dos clases de latín: el culto, usado para escribir y en la oratoria, y el vulgar, empleado en la conversación cotidiana y por los grupos de bajo nivel cultural. Frente al latín culto, que se mantuvo estático, fijo en la lengua escrita, el latín vulgar evolucionó mucho hasta llegar a mostrar profundas diferencias morfológicas, léxicas y sintácticas con el primero.
El castellano es una de las lenguas que se formaron en la península ibérica como producto de la evolución del latín vulgar durante la edad media, conjuntamente con el astur-leonés, el gallego, el navarro-aragonés y el catalán. Entre éstas, las que alcanzaron un mayor florecimiento en el orden gramatical y literario fueron el castellano, el catalán y el gallego. El castellano debe su nombre a su nacimiento u origen en la región de Castilla.
La hegemonía política de Castilla en el siglo XV determinó el predominio de su idioma sobre las demás lenguas de España. Pero se conservaron con absoluta autonomía el euskera, el gallego y el catalán. El gallego y el catalán no deben ser considerados como dialectos del español. Son lenguas hermanas del castellano al igual que el italiano, el francés, el portugués y el rumano.
¿Castellano o español?
Desde el punto de vista estrictamente lingüístico, no hay preferencias por una denominación u otra. La Real Academia de la Lengua, fundada en 1713, llamó castellano al idioma hasta 1923, año en que se cambió esta denominación por la de español, por lo que el término español es relativamente reciente y no es admitido por muchos hablantes bilingües del Estado Español y proponen volver a la denominación más antigua que tuvo la lengua: castellano, entendido como “lengua de Castilla” debido a que en España hay regiones autónomas en las que se habla además del español, otro idioma, como es el caso de Galicia, por citar un ejemplo.
En los países hispanoamericanos se ha conservado esta denominación y no existe dificultad alguna a la hora de entender como sinónimos los términos castellano y español. Así que español y castellano son términos sinónimos y completamente válidos a la hora de nombrar nuestro idioma. Sin embargo, cada país tiene completa autonomía de nombrar su lengua oficial de acuerdo a criterios propios, como es el caso de Cuba, donde es constitucionalmente denominada “español”, mientras que en Venezuela según el artículo 9º: “El idioma oficial es el castellano…” y académicamente se enseña como “Lenguaje y Literatura”, “Castellano y Literatura” o simplemente “Castellano”.
El español ocupa el tercer lugar entre las principales lenguas del mundo, y es el segundo idioma más estudiado en el mundo, con un total aproximado a 520 millones de hablantes, superado sólo por el inglés y el chino. El español o castellano es la lengua oficial de España, Argentina, Uruguay, Chile, Perú, Bolivia, Ecuador, Venezuela, Colombia, Panamá, Cota Rica, Honduras, Nicaragua, El Salvador, Guatemala, México y Cuba. El castellano es hablado, además, por grades núcleos d población de origen hispano al sur de los EEUU (California, Arizona, Nuevo México y Texas), existiendo importantes colonias de hispanohablantes en las ciudades de New York, Miami y Chicago. Se calcula en unos 40 millones de habitantes de los EEUU que por razones de su origen, poseen dominio del español o se expresan primordialmente es esa lengua.
El idioma que hablamos, puede por tanto llamársele español o castellano; sin embargo, como ya fue dicho anteriormente, las legislaciones de cada país pueden llamarle de una u otra forma según acuerden, incluso llegar a llamarle venezolano, chileno o ecuatoriano, por sólo citar tres posibilidades, así como lo hizo primeramente España. No obstante, más importante que su denominación, es su riqueza y estructura gramatical, la que debemos conservar y cosechar para preservarlo cada vez más.
 
Blogger Templates